Mitos y realidades sobre la salud mental: desmitificando conceptos erróneos comunes

Descubre la verdad sobre la salud mental: desmontamos mitos y realidades para una comprensión más clara en nuestro nuevo artículo.

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El contexto sociocultural ha perpetrado una serie de falsas creencias asociadas a la gente que padece alguna enfermedad mental, ya que lo podemos ver en las películas por ejemplo, donde la mayoría de veces la persona con una enfermedad mental suele comportarse de manera psicopática.

Por lo que es necesario normalizar hablar del cuidado a la salud mental y sus patologías, como hablar de cualquier otra enfermedad por ejemplo la Diabetes o Hipertensión. Así mismo es importante sensibilizar el tema, siendo necesario desmontar los mitos sobre la salud mental, ya que puede ayudar a romper el estigma y generar una cultura que anime a personas de todas las edades a buscar apoyo cuando lo necesiten. 

He aquí algunos conceptos erróneos habituales en torno a la salud mental, vamos a desmitificarlos:
 

Mito 1: Si tiene algún trastorno es porque bebe, consume drogas o no se cuida

El consumo de drogas está considerado como un factor que puede precipitar el inicio de un trastorno mental o empeorar sus síntomas, pero no siempre es su causa primaria. La mayoría de personas con trastornos mentales se cuidan y no consumen sustancias nocivas, pero aún así, tienen el trastorno. No podemos culpabilizar a las personas por haber desarrollado la sintomatología que presentan.


Mito 2: Las personas con un trastorno mental son violentas y agresivas. 

Las personas que tienen un trastorno mental, incluso grave, no son violentas. Tienen las mismas probabilidades de presentar episodios de violencia que cualquier otra persona.  Por el contrario, son más vulnerables a ser víctimas de violencia y otro tipo de delitos que las personas que no tienen un trastorno de salud mental. 

Mito 3: El deterioro de la salud mental no es un problema que afecte a los adolescentes. Sus cambios de humor se deben a las fluctuaciones hormonales, y actúan así para llamar la atención.

Los adolescentes suelen tener cambios de humor, pero eso no significa que no puedan tener también trastornos de salud mental. El 14% de los adolescentes de todo el mundo tiene problemas de salud mental. A nivel mundial, el suicidio es la quinta causa de muerte más frecuente entre los jóvenes de 10 a 15 años y la cuarta causa de muerte más común entre los adolescentes de 15 a 19 años. La mitad de los problemas de salud mental aparecen antes de los 14 años.
 

Mito 4: No se puede hacer nada para evitar que las personas desarrollen problemas de salud mental.

Son muchos los factores que pueden proteger a las personas de los trastornos mentales, entre ellos, el fortalecimiento de las habilidades sociales y emocionales, la búsqueda de ayuda y apoyo en fases tempranas, el desarrollo de relaciones familiares comprensivas, afectuosas y cálidas, un entorno escolar positivo y patrones de sueño saludables.

Mito 5: Las personas que padecen una enfermedad mental No pueden trabajar

Pueden trabajar como cualquier otra persona si se les brindan las condiciones y apoyos necesarios para que lo hagan. En muchas ocasiones, la barrera para que no puedan trabajar no deriva del trastorno en sí mismo, sino de la escasa preparación de la sociedad y las administraciones para dotar de recursos necesarios. Desarrollar un trabajo tiene grandes beneficios para cualquier persona pues nos ayuda a mejorar nuestra autoestima y  facilita una rutina en nuestro día a día.

Mito 6: No existe forma de ayudar a las personas que tienen algún trastorno mental

Existen tratamientos, estrategias y apoyo de asociaciones para personas que lo necesitan. Las personas afectadas, si reciben el tratamiento adecuado, pueden llevar vidas completamente plenas. La sociedad en general puede y debe contribuir a promover una buena salud mental de la población.

Recordemos que la salud es integral y debemos generar hábitos de autocuidado para tener una buena calidad de vida, saber cómo podemos prevenir afectaciones a nuestra salud mental debe ser igual de importante que las acciones que hacemos para prevenir esa enfermedad hereditaria que hay en nuestra familia o las que queremos evitar en nuestra vida. Tener más información nos ayudará a entender mejor incluso cómo podemos apoyar a una persona cercana con algún padecimiento mental o cuando nos llegue a suceder. Ya que cualquiera de nosotros podría experimentar una situación de crisis a nuestra salud mental por temporalidad derivado de una situación y factores externos a nosotros, y agravarse si no tomamos a tiempo las medidas necesarias. Por ejemplo el estrés excesivo que genera tu trabajo, no es normal que comience a afectar en la salud ni en tu vida personal, idealmente deberías acudir a un psicoterapeuta para que te oriente en técnicas y herramientas para aprender a gestionar adecuadamente el estrés y evitar un desgaste profesional y mayores afectaciones a tu salud en general.


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PSIC Eva Molleda
Psicología
Salud Mental
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